Galileo Galilei (1564 – 1642)
Edición: 1964
Traducción: del latín por Jorge Fernández Chiti
ISBN: 84-95495-15-5
Tamaño: 10.5 cm x 18 cm
Tapa: blanda
Título de la original: Siderius Nuncius
Edición: Imprenta de Thomas Baglionus, Venecia Año: 1610
En su introducción el profesor José Babini, de la Universidad de Buenos Aires, hace una extensa y muy interesante biografía del que fuera una de las figuras señeras en la astronomía. Luego encontramos la dedicatoria que Galileo hace de su texto a quien fuera su mecenas, Cosme II de Médicis, IV Gran Duque de Toscana. Encontramos que para su impresión se contaba con permiso eclesiástico y privilegio. El texto comienza con el anuncio de la construcción del anteojo que más tarde llamaría telescopio, según ideas llegadas de Bélgica y Francia. A lo largo del resto de la obra, Galilei, considerado uno de los más importantes prosistas italianos, utiliza su facilidad para las letras y en forma amena describe sus observaciones de la superficie lunar, las estrellas fijas y nebulosas para finalmente anunciar el descubrimiento de los que llamó “Astros Mediceos”, los 4 satélites principales del planeta Júpiter. Día tras día, Galileo toma nota de la posición de tales cuerpos, deduciendo la rotación alrededor del astro principal, y su periodo de rotación aproximado. La era de la astronomía telescópica ha comenzado, una revolución en la ciencia que ya no se detendría. Obra invalorable y de lectura fundamental para toda persona que se interese en la astronomía observacional moderna.
Autor:
Nacido en Pisa el 15-12-1564 en el seno de una familia noble, cursa estudios de medicina en la misma ciudad en 1581 y de matemáticas en Florencia, siendo catedrático en Padua entre 1592 y 1610. Construyó un telescopio de 30 aumentos con el que pudo observar los movimientos celestes, descritos en su obra «El mensajero celeste». Seguidor del pensamiento de Copérnico, sostiene la teoría heliocéntrica, según la cual los astros no giran alrededor de la Tierra sino que ésta y otros planetas circulan cíclicamente en torno al Sol. La Iglesia emprende un proceso contra Galileo al considerar sus afirmaciones contrarias a la Biblia, lo que le llevará a comparecer ante la Inquisición en 1633 al no retractarse de sus afirmaciones. La condena posterior le confina en Arcetri, a pesar de mostrarse arrepentido, donde seguirá estudiando hasta su fallecimiento. Galileo preconiza la ciencia moderna, al establecer la observación y la experiencia como herramientas básicas del conocimiento y la formulación matemática como método explicativo de la naturaleza. Sus trabajos astronómicos, de suma importancia, describen la Luna y muchos de sus rasgos, detallan la existencia de miles de estrellas y formulan un modelo explicativo de la Vía Láctea. En el terreno de la física, formula una teoría sobre la gravitación, elabora leyes sobre la relatividad del movimiento y describe la uniformidad del movimiento pendular independientemente de la amplitud del mismo. Muere en Arcetri el 08-01-1642.
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